viernes, 31 de diciembre de 2010

Todos sobre Zanzíbar

John Brunner publicó en 1968 esta novela de ciencia ficción ambientada en 2010 y por pura casualidad la he leído este año. Ganadora del premio Hugo de 1969, es una lástima la traducción que hizo la editorial Acervo (es la que tengo), seguramente sea mejor la traducción publicada en 2002 por la editorial Factoria de ideas. 

A principios del siglo XXI, el planeta Tierra es una bomba a punto de estallar. La población ha alcanzado niveles inimaginables, por lo tanto es necesario promover leyes eugenésicas, como el control de la natalidad obligatoria y la manipulación genética forzosa. Con estas premisas Brunner construye su historia futurista. 

En el terreno literario Todos sobre Zanzíbar tiene una atípica estructura un tanto desconcertante. Esta narrada sobre cuatro ejes: “Las cosas que pasan”, “Contexto”, “Continuidad” y “Viendo primeros planos”. Se compone de pequeños episodios de cada uno de los ejes que se van intercalando: 

  • Continuidad” es el eje principal que cuenta una historia, entendida como unos personajes principales a los que les ocurren una serie de cosas interesantes. 
  • Las cosas que pasan” son flashes sobre la sociedad, algunos episodios de este eje son una mezcolanza de titulares de periódicos, anuncios por palabras, noticiarios de TV, etc. Otros son pura literatura experimental. 
  • Contexto” es un cajón de sastre donde caben cosas completamente dispares: poemas; guiones para noticiarios de TV (algunos cuentan cosas que ya hemos conocido en los otros ejes) o para anuncios comerciales. 
  • Viendo primeros planos” narra historias íntimas de diversos personajes, algunos de ellos aparecen también en “Continuidad” pero lo que se cuenta en este eje está relacionado sólo tangencialmente con la historia principal; su objetivo principal es enriquecer los personajes.
Me resisto a terminar esta entrada sin copiar estas palabras de Chad Mulligan en Contexto(17) El peso de las deudas:

" —Sí, me llamo Chad Mulligan. Muy bien. Voy a hablarte de los pobres. ¿Sabes dónde se puede encontrar un pobre? No, no salgas a la calle como un imbécil a buscar una persona que vista harapos sucios y duerma en la acera. Hasta hace pocos días esa persona podría ser yo, y tengo unos cuantos millones de dólares.

Y no hace falta tampoco ir a la India ni a Bolivia ni a Beninia para encontrar un pobre. Basta recorrer exactamente la distancia al espejo más cercano.

Un tío que vive como yo lo he hecho durante los últimos tres años, sin casa y sin siquiera una maleta, no es necesariamente pobre, como acabo de decir. Pero, libre de las cosas que obstruyen la percepción de la verdad, tiene ocasión de examinar la situación y sopesarla. Una de las cosas que puede ver es lo que ha cambiado y lo que no, en este nuevo siglo magnífico nuestro. 

Las cosas que han subido ligeramente por encima del promedio seis veces— son, entre otras, tus ingresos típicos, el coste de la alimentación y del vestido, el de las pijadas sin las cuales tienes la impresión de ser un don nadie —una TV holográfica, por ejemplo— y los costes generales de alquileres y alojamientos.

Pero ¿qué es lo que ha subido más, más más? Cosas como el agua. ¿Sabías que pagas once veces más por el agua de lo que se pagaba hace cincuenta años, y sin poder gastar más porque no la hay?

Amigo mío, no tienes que ir a la India o a África para encontrar gente al borde de la pobreza. Tú lo estás. Nuestros recursos se estiran de tal modo que conseguir un vaso más de agua para que cualquiera pueda beberse dos en vez de uno cuesta once veces más que en 1960. Se puede vivir sin TV, se puede vivir sin teléfono, pero ¿sin agua? ¡Aja! No nos morimos de hambre pero, si quieres disfrutar de una dieta apropiada para tu estatura y tus músculos sin precedentes, no pagas seis veces más que tu abuelo, sino probablemente nueve o diez veces.

¿Está claro? Existe el conocimiento necesario para hacer posibles todas estas cosas, pero como estamos tan cerca de la quiebra a nivel planetario, tu hogar no contiene prácticamente nada que tus abuelos no reconocieran inmediatamente y que no supieran utilizar sin necesidad de que se les dijera cómo; y, lo que es más, probablemente se quejarían de la peste de la basura que no se retira de las calles e incluso de tu olor, porque en sus tiempos el agua era más barata y se podían duchar e incluso bañar tantas veces como les apeteciera."

Si quieres conocer más detalles de este libro puedes leer el archivo pdf de Juan Carlos Pereletegui o el blog de Severian.

sábado, 25 de diciembre de 2010

Seda

Seda, de Alessandro Baricco, es una historia contada como ¿novela corta?,  ¿cuento largo?,  ¿relato?,  que cada cual decida, si puedo decir que son 125 páginas de letra gorda y ancho margen. 

"Hervé Joncour tenía treinta y dos años.
Compraba y vendía.
Gusanos de seda."

De esta forma el narrador nos presenta al protagonista y la historia da comienzo. ¿Y de que va? pues sobre el deseo que como tal es caprichoso, tenue, apasionado, fantasioso o tantos otros adjetivos como se nos ocurran. 

Seda es una historia del deseo de un hombre que no duda en volver a hacer miles de kilómetros por conseguir ese instante mágico y al mismo tiempo es la historia de dos mujeres con un sorprendente final.

Pero también nos habla sobre la monotonía de la vida con el contrapunto de Baldabiou, un personaje que casi pasa desapercibido, el único que es capaz de bajarse del tío vivo en que se encuentran cuando el azar le ofrece la señal convenida mientras el resto permanece aferrado a sus caballitos.

De rápida lectura, lo leí en el trayecto Valencia-Madrid-Valencia en la "comodidad" de una multivan de Wolsvagen,  consiguió hacerme olvidar las 8 horas pasadas en la "fregoneta".

miércoles, 8 de diciembre de 2010

Comida quijotesca en Burgos

Foto de grupo de los participantes en la comida ante el local de La Cantina
de Ibeas de Juarros. Falta Fernando Portillo, que tuvo que marcharse antes de tomarla.

Antes de terminar la lectura de "El Quijote" ya se fue planteando la posibilidad de celebrar este evento con un comida quijotesca, algo que acabó cuajando y que finalmente se iba a producir el sábado, 4 de diciembre, en el pueblo de Ibeas de Juarros, a escasos kilómetros de Burgos. Pese a llegar el último a la lectura me integré en la misma y conseguí acabarla así que, ¿por que no ir a la comida?, conocía virtualmente a los asistentes y me animé a realizar el viaje hasta Burgos.

Habitación en La Caraba
Lo primero fue conseguir que Mª Amparo se apuntara y después cogerme el viernes de vacaciones pues son 600 kms. en coche y prefería hacer el viaje con tranquilidad y acudir a la cena que Mayte "Bipolar" había organizado para los que veníamos de fuera. Una retención por obras en la A-1 nos hizo llegar una hora más tarde de lo previsto así que tuvimos el tiempo justo para instalarnos en la casa rural "La Caraba" de Ibeas de Juarros y salir hacia Burgos a buscar el Bar Huelgas. 

Nada más entrar al bar llamé a Mayte pues no veía ningún grupo de gente y me dijo que estaban llegando. Mientras esperábamos entró al bar Paco Cuesta al que medio reconocí pero fue él quien se acercó a nosotros e inmediatamente después se presentaron Esther "Aldabra" y Alberto, que casualmente también estaban alojados en "La Caraba" y habían llegado antes que nosotros al bar.

Poco después llegaron Mayte con Pablo "Cornelivs", Myriam, Asun, Antonio y Merche Pallarés, llegando más tarde Pedro pues el tren en que venía se había averiado dejándolo tirado en una estación. Tras un pequeño desconcierto inicial pedimos unos montaditos que Paco se encargó de ir cortando para los doce que conformábamos el grupo. 

Es difícil explicar con palabras lo que se siente cuando te reúnes con otras personas a las que no conoces personalmente, pero sabes que compartes con ellas el gusto por la lectura de El Quijote de Cervantes. Pasas de la expectación a un dialogo fluido como si nos conociésemos desde hace tiempo, como en realidad así es.

De esta cena destacaría la explicación del perspectivismo que nos dio Pedro a una pregunta de Pablo sobre los narradores y su fiabilidad. Fueron unos minutos de una clase magistral sobre "El Quijote". Dada la hora algunos nos retiramos a dormir presos del cansancio del viaje mientras los otros se fueron a tomar una copa y bailar un rato en un fría noche con -6º C y nieve en la calle.


El Ferrari de Fernando Alonso
El sábado por la mañana cuando ya nos íbamos a Burgos nos encontramos con Esther y Alberto que iban a visitar el museo de la Evolución Humana; nosotros teníamos reserva para visitarlo tras ver los yacimientos de Atapuerca al día siguiente, pero como no se trataba de una visita guiada nos fuimos con ellos. Un museo de reciente construcción en el que estuvimos hora y media  mayormente en la planta -1, la dedicada a los descubrimientos de la sierra de Atapuerca. A la salida nos acercamos a ver el monoplaza de Fernando Alonso que estaba expuesto bajo una carpa.
José Manuel y Mª Amparo en Burgos

LLegamos unos minutos tarde al restaurante La Cantina donde nos habían preparado un pequeño salón para el grupo quijotesco. Habíamos pasado de 12 a 22 con la incorporación de más blogueras y blogueros: Marina, Luz "Ele Bergón", Mª Angeles "Abejita de la Vega", Celestino "Pancho", Manolo y otros a los que no conocía como Fernando Portillo o Caín. Y no me olvido de los "sufridores" como Mariano y David (marido e hijo de Luz) o Begoña (mujer de Paco).

Sentados a la mesa
Esperamos la olla podrida 
Es el turno de leer los textos de los que no pudieron asistir
Estamos atentos a la lectura de Pedro
Que lee y ...
sigue leyendo 
Pablo "Cornelivs" descorchando la botella de cava para brindar
Mª Amparo y José Manuel 
Paco Cuesta
Intercambio de boina. 
Ahora la lleva Pablo "Cornelivs"
Marina y Begoña
Pedro hablando con Antonio Aguilera
La olla podrida resultó espectacular y a los postres primero Antonio nos leyó un mensaje de Manuel de la Rosa "Tuccitano" y luego Pedro nos leyó los mensajes que había recibido de Montserrat Sala, Martine y Sr. de la Vega, y finalmente brindamos por Jan Puerta que se encuentra en tierras chilenas. Antes de despedirnos nos hicimos un par de fotos de grupo, la que hizo Manolo la puedes ver en "La Acequia" y la que hice yo encabeza este texto. 

Explicaciones de la guía en Gran Dolina 

Al día siguiente amaneció lloviendo y tras visitar en la fundación "Atapuerca" la exposición "Sexo en piedra" cogimos el autobús que nos llevó a la trinchera del ferrocarril para ver los yacimientos donde se han encontrado restos humanos de hace 1'2 millones de años, se trata del Homo antecessor. La explicación se vio deslucida al visitar la Galería pues el repiqueteo del agua sobre los paraguas impedía oír con claridad a la guía que acabó hecha una sopa.
Yacimiento Galería
Nos presentaron a Miguelón
De vuelta en Ibeas de Juarros fuimos a La Cantina a comer  y nos pedimos lechazo al horno. Parecía difícil superar la olla podrida del día anterior pero el lechazo lo consiguió y además fuimos reconocidos y nos trataron muy bien. A las 15:20 ya estábamos en el coche dispuestos a volver a casa tras pasar un estupendo fin de semana donde he conocido a unos amigos virtuales. Espero que nos volvamos a ver en el 2011 tras la nueva lectura que nos ha preparado Pedro Ojeda, nuestro profe.